ARGENTINA.- Los alumnos del colegio Educación del Talento (Pringles 2.000, Yerba Buena) fueron parte de una experiencia muy especial que recordarán durante bastante tiempo. Los adolescentes tuvieron la oportunidad de conversar con el astronauta danés Andreas Mogensen, el cual orbitaba en la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés).
En un ida y vuelta cargado de ansiedad, los estudiantes lograron conectarse con el espacio durante 10 minutos para despejarse algunas dudas sobre este curioso trabajo y las aventuras que pueden vivirse fuera de la Tierra.
“En la clase de inglés hicimos varias preguntas y entre ellas luego seleccionamos las más interesantes para consultarle”, comentaron los participantes en una entrevista realizada por el programa LA GACETA Central de LG Play. ¿Desde cuándo querías ser astronauta?, ¿cuál es tu película favorita sobre el espacio? ¿se parece a la realidad? y ¿qué debiste estudiar? fueron algunas de las preguntas planteadas.
“Estamos felices y honrados de tener esta oportunidad, es algo realmente impensable para nosotros así que estamos muy contentos. Tuvimos mucha suerte también porque se dieron todas las condiciones favorables para tener esta conversación”, acotó otra de las alumnas.
Radioaficionados
La propuesta fue posible gracias a la intervención de Amateur Radio on the International Space Station (Ariss), institución formada por diferentes organizaciones espaciales -como la NASA, la Comisión Aeroespacial de Europa, etcétera- y grupos de radioaficionados que promueven la visibilización de ambas actividades.
“Ese momento de verle la cara a los chicos cuando se pasa del no sonido a escuchar al astronauta es impagable, ese cambio es algo que los chicos van a recordar siempre. Imaginar que hay alguien en el espacio escuchando lo que ellos dicen o preguntas y escuchar su respuesta es importante y valioso a nivel educativo”, comentó Gabriel Funes, coordinador y miembro de Radio Club Tucumán.
En nuestra provincia es la cuarta vez que este evento se lleva a cabo en el ámbito educativo. “Básicamente (esto es posible gracias a) la coordinación de una comunicación por BHF, como con los famosos handy que usan los walkie talkie. Se usan antenas especiales de mucha ganancia ya que la ISS está a 400 kilómetros de altura y circula a 28.000 kilómetros por hora, entonces se debe realizar una logística específica para poder seguirlos en el cielo”, indicó el radioaficionado Augusto Parra.